Por Carlos García
¿Se ha detenido usted a revisar la historia reciente (últimos 50 años) de América Latina, particularmente del Cono Sur? ¿Ha analizado la historia de Venezuela en este período, desde el Pacto de Punto Fijo hasta nuestros días? ¿Ha estudiado la realidad del país antes de Chávez y ahora con la Revolución Bolivariana y Socialista? ¿Se ha detenido a pensar en las propuestas de la oposición y las propuestas de la Revolución? ¿Ha entendido claramente a quién sirve cada uno de los sectores en pugna por el poder en Venezuela? ¿Tiene claro lo que es la política imperialista, el papel de las multinacionales y el programa neoliberal del fascismo en Venezuela? ¿Conoce a plenitud el programa de la MUD para el caso que triunfarán en unas elecciones o tomaran el poder por asalto? ¿Ha visto, sin apasionamientos, las acciones contra el pueblo lanzadas por la cúpula oposicionista, como mecanismo de acción estratégica para destruir el proceso Bolivariano? ¿Se ha detenido a analizar su propia identificación ideológica con la realidad venezolana?
Recuerde que durante la segunda mitad del siglo XX, América Latina y particularmente el Cono Sur fueron víctimas de las más crueles y genocidas dictaduras amparadas por las burguesías nacionales de cada país y sostenidas por el imperialismo yanqui. La mayoría de esas dictaduras se instalaron a través de golpes de estado militares, que arremetieron de manera feroz contra los pueblos violentando desde los más elementales derechos humanos hasta el derecho a la vida como máxima expresión de la humanidad. Estas dictaduras cometieron verdaderos genocidios contra los pueblos originarios: mapuches, aymaras, y otras etnias en Chile, Argentina, Bolivia, Perú, Brasil, Ecuador y utilizando falsas democracias en Colombia y Venezuela produjeron masacres, desalojos, expropiaciones y asesinatos. Impusieron los más crudos mecanismos de represión fascista contra los pueblos, asesinando y desapareciendo a miles de hombres y mujeres que lucharon por sus patrias, por su libertad, por la justicia y por la paz.
En Venezuela a partir del 23 de Enero del 58, luego de la dictadura Perezjimenista, los dos grandes paridos AD y COPEI, junto a otros minoritarios, URD y la burguesía, firmaron el llamado pacto de punto fijo, desde el cual se comprometieron a facilitar la neocolonización del país por parte del imperialismo y se dedicaron a perseguir, torturar, asesinar a los hombres y mujeres que buscaban la soberanía y la independencia nacional. Pusieron las fuerzas armadas al servicio de los intereses transnacionales, imperiales y de la burguesía criolla y vendieron buena parte del país a intereses privados internacionales: Hierro, Aluminio, Petróleo, CANTV, electricidad, tierras cultivables, reservas naturales, etc. Durante cincuenta años la burguesía fascista y las direcciones de los partidos AD y COPEI, mantuvieron silencio ante los atropellos y el genocidio, escondieron los hechos represivos e invisibilizaron al pueblo, conculcándole sus derechos ciudadanos y humanos. Y hoy, esa burguesía, otrora tan callada en la complicidad genocida, en la explotación y en la traición a la patria, salta a la palestra con el poder de sus medios de comunicación a intentar destruir el proceso revolucionario Bolivariano y Socialista, porque este poder es del pueblo y le ha devuelto la patria al pueblo y está reivindicando sus derechos ciudadanos y humanos.
La revolución Bolivariana y Socialista liderada por el eterno comandante Hugo Chávez, vencedora en 17 procesos electorales ejemplares de democracia y libertad, de respeto y justicia, va poco a poco construyendo la nueva sociedad y para ello ha tocado los poderosos intereses de la burguesía y el imperialismo, lo que ha traído, como consecuencia inmediata, el ataque del imperio y sus lacayos criollos a la revolución que es soberanía, que es trabajo justo, que es salarios verdaderos, que es salud gratuita para todos, que es educación sin pagos de matrícula ni mensualidades, que es soberanía alimentaria en marcha, que es desarrollo del campo y la industria nacional, que es solidaridad con todos los países del mundo, que es justicia, que es paz. Y tiene un plan: El Plan de La Patria 2013-1018, donde se establecen cinco líneas estratégicas para el desarrollo Nacional integral y latinoamericano y para la preservación de la humanidad.
La revolución Bolivariana y Socialista responde a los grandes intereses nacionales del pueblo venezolano, responde a una vida de calidad, en justicia y en paz, con libertad y democracia verdaderas ejercidas por el propio pueblo, pues busca empoderar al pueblo para que sea su propio líder del desarrollo. La oposición Fascista representa el poder de la minoría burguesa, que nunca ha trabajado y ha amasado fortunas a través de la explotación del hombre por el hombre, representa al imperialismo depredador de la riqueza y la naturaleza, invasor de países y explotador de pueblos, genocida y neoliberal.
El programa de la MUD (Realmente el fascismo representado por Primero Justicia y los descendientes de TFP) simple y llanamente es la vuelta al neoliberalismo, neocolonialismo, la represión, el genocidio, la injusticia y la negación de los derechos humanos. Es volver a las privatizaciones de las empresas del estado, al negocio de la corrupción, a la negación de la justicia y la libertad como en los mejores tiempos de la Cuarta República; todo esto elevado a la enésima potencia, pues de obtener el poder, desatarían como en el cono sur y Centro América, la más feroz, sistemática y brutal represión contra todo lo que les huela a Revolución. Recordemos a Pinochet y la burguesía Chilena, a Videla y la Burguesía Argentina, etc.
Como oposicionista al proceso Bolivariano, se ha detenido a pensar la ideología que sigue y defiende? ¿Ha confrontado el Fascismo con el Socialismo del siglo XXI? Usted se ha detenido para analizar el anticomunismo que maneja la derecha fascista, para establecer diferencias entre democracia representativa y democracia participativa, para entender que toda revolución conlleva cambios radicales en la gente, desde lo cultural hasta lo político e ideológico y que no se hacen revoluciones en un día, ni por decreto? ¿ Se ha preguntado el porqué del gobierno Comunal, de la inclusión, de la participación y también de los errores cometidos, quizás menos que los aciertos obtenidos? ¿Ha revisado el mensaje que envía la derecha fascista donde le conmina a la violencia y niega toda acción buena del Gobierno? ¿Se ha detenido a observar la conducta del cogollo fascista de la MUD en relación a sus seguidores y su conducta personal y de clase? ¿Ha establecido diferencias entre propiedad privada de medios de producción y propiedad privada personal de bienes y servicios individuales y familiares, para caer en cuenta de la gran mentira que maneja el fascismo sobre esta realidad, todo en aras de sus intereses y a nombre del anticomunismo trasnochado que inventaron?
Ojalá, oposicionista, que pueda leer este artículo, de manera tranquila, razonada, equilibrada y darse respuesta a la mayoría de interrogantes que se le presenten. No pretendemos volverlo Chavista o Socialista, sólo pretendemos que se haga racional y se sume a una verdadera oposición democrática, constructiva y vigilante. Que así sea.
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